lunes, 23 de agosto de 2010

Síntomas

Unión Española, como institución, ha crecido mucho en los últimos años. De andar peleando todos los años el descenso (con la notable excepción del Apertura 2005), hoy tenemos una institución que aspira a jugar internacionalmente y obtener títulos. Todo gracias a una Universidad y particularmente un señor que no sólo creyó en el proyecto sino que también estuvo dispuesto a poner las lucas para hacerlo realidad.

Sin embargo, con el correr de los meses, Unión muestra claros síntomas de que hay problemas en el camino:

1. Unión actualmente no juega a ser protagonista. Lo que hace es tratar de bajar el ritmo del partido y capitalizar las escasas oportunidades que genera.

Esto es diametralmente opuesto a lo que ocurría durante Luis Hernan Carvallo. Aunque este último tenía algunas cosas importantes a criticar (lento al recuperar el balón significaba que equipos con fuerte mediocampo le quitaban el protagonismo, y flaqueaba en los partidos importantes), por lo menos proponía y cuando le salían las cosas los resultados eran hermosos. Todo el público que volvió a Santa Laura a ver el fútbol de LHC, se ha ido con R. Israel.

2. Escaso aporte de las divisiones inferiores.

Contra Colo Colo no jugó NINGÚN jugador formado en casa de titular. Ninguno. A mi parecer, existen dos probables conclusiones: O Unión Española es incapaz de formar jugadores de nivel (salvo excepciones notables), o el actual entrenador no sabe, no se atreve, o no tiene ningún plan para incorporarlos. En todo caso, para ser justos, salvo excepciones (recuerdo 3: Héctor Pinto, el Nano Díaz y LH Carvallo), ningún entrenador de los últimos años tuvo el interés de hacerlo.
La demora en la construcción de los campos deportivos tampoco va a ayudar en este aspecto.

3. Contrataciones internacionales que llegaron a hacer banca o que vienen en descenso en su carrera.

El caso más emblemático del primero es Massiero, jugador que con suerte ha jugado 90 minutos en todo el año. Otro caso emblemático del otro es Rubio cuyo desempeño dista mucho de ser aporte. Es Medina un jugador del nivel que necesita Unión? Lo que sucede al final es que en lugar de invertir, se gasta, porque el jugador termina yéndose del club sin pena ni gloria. El último jugador que vendió Unión bien es Gustavo Canales, de por lo menos una docena de contrataciones en los últimos 3 o 4 años. El resto? O Unión está quemada con la mala suerte, o no tienen la más absoluta idea de contratar y es urgente hacerse asesorar.

El resultado de todo esto, hasta ahora, es un magnífico Estadio, al que asistimos no más de 2000 personas los fines de semana.

Espero que estos síntomas sean pasajeros y volvamos a un ciclo virtuoso de nuevo. Confío en el trabajo del Coto Sierra, por ejemplo, y que los que trabajan y se la juegan, eventualmente logran el resultado esperado.

viernes, 6 de agosto de 2010

Vergüenza

Nada mas que agregar.

Segovia, es hora de actuar.